El 87,8% de los estudiantes de 7º curso básico (12 años) a 4º medio (17 años) ha sido víctima de ciberbullying según una encuesta realizada por la UAB y Paz Ciudadana sobre un universo aproximado de 50 mil escolares. La encuesta investigó si los adolescentes habían sido agredidos por otros de su mismo centro mediante celulares (SMS, fotos o videos) o a través de Internet (sitios web, fotos en línea, foros, blogs, mails u otros).
Los resultados fueron analizados en el II Congreso Internacional de Criminología dentro del seminario-taller “Acoso escolar cibernético en Chile”.
El estudio detectó diferencias entre los autores del bullying tradicional y los responsables del acoso escolar cibernético, lo cual justificaría el desarrollo de nuevas líneas de investigación específicas sobre el perfil de los cibermatones.
También llamó la atención de los expertos el aumento de los casos de ciberbullying en los últimos años. Según la III Encuesta Nacional de Violencia en el Ámbito Escolar realizada en 2009 los porcentajes de víctimas en los mismos cursos y similar universo fueron mucho menores:
7º Básico: 14,9% era víctima de ciberbullying.
8º Básico y 1º Medio: 14,3%.
2º Medio: 13,2%.
3º Medio: 10,5%.
4º Medio: 12,4%.
Según otro estudio de Paz Ciudadana realizado en 2008 el 10,7% de los escolares chilenos se declaró víctima de matonaje a través de Internet. Las chicas dijeron ser 3 veces más víctimas que los hombres y con una mayor frecuencia, mientras que los hombres señalaron ser más agresores de bullying y ciberbullying, un patrón similar al detectado en Argentina por el Foro Generaciones Interactivas.
PantallasAmigas alerta del incremento de problemas relacionados con nuevas formas de violencia sexual en el entorno digital como la sextorsión y el acoso sexual por Internet. Estos delitos afectan a adolescentes, pero también encuentran víctimas entre las mujeres adultas.
Con motivo del Día Internacional contra la Violencia de Género, que se celebra el 25 de noviembre, PantallasAmigas ha puesto en marcha la página web http://www.ViolenciaSexualDigital.info, que ofrece consejos para evitar la creciente amenaza de violencia sexual generada en el entorno digital tanto a adolescentes como a mujeres adultas.
El acoso sexual online a menores suele adoptar una estrategia de grooming, consistente en un acercamiento previo para ganarse con engaños la confianza de la víctima para luego, desde la cercanía, ejecutar la agresión o el chantaje. La sextorsión se manifiesta por lo general mediante un chantaje basado en la posesión por parte del agresor de imágenes íntimas de su víctima que amenaza con hacer públicas. En ocasiones, ambos fenómenos van unidos cuando quien realiza la sextorsión consiguió las imágenes mediante una estrategia de grooming.
Según comenta Jorge Flores, Director y Fundador de PantallasAmigas “desde que iniciamos nuestro trabajo en 2004 venimos observando que, ante los retos que plantea el uso de Internet, las víctimas son, con frecuencia, mujeres. En los últimos tiempos es alarmante el avance de problemas como acoso sexual y la sextorsión que vienen sufriendo las adolescentes”.
La violencia contra las mujeres, cada vez más digital y adolescente
“Aunque no existen aún suficientes estudios ni datos concretos al respecto, es un hecho constatado día a día, tanto por nuestra organización como por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que este tipo de delitos aumenta con rapidez”, dice Flores.
Si se tiene en cuenta que sí es un hecho acreditado que la violencia de género afecta cada vez a mujeres más jóvenes y adolescentes y que ciertas características de la Red (presunción de anonimato e impunidad, facilidad, inmediatez...) propician situaciones de acoso diversas, la conclusión parece obvia: la violencia sexual contra adolescentes seguirá aumentando en el entorno digital.
25 de noviembre, Día Internacional contra la Violencia de Género
La violencia contra las mujeres adopta en muchas ocasiones la forma de violencia sexual que, a su vez, puede manifestarse en forma de acoso, agresiones o abusos. “Dado el incremento de la violencia sexual digital sufrida por adolescentes, creemos necesario realizar una aportación específica en un día tan señalado como el 25 N”, comenta Jorge Flores. Con esa finalidad, han puesto a disposición de la sociedad la versión inicial de un web que pretende aportar recursos e informaciones para la lucha contra este grave problema: http://www.ViolenciaSexualDigital.info. De esta manera también se aprovechan las oportunidades que Internet ofrece para la prevención y la asistencia a las personas afectadas.
Consejos preventivos básicos
Según PantallasAmigas, se pueden dar tres recomendaciones básicas para evitar ser víctima de violencia sexual digital:
No mostrar, grabar, enviar o almacenar imágenes íntimas en ningún caso, suelen ser la clave del chantaje.
Mantener el ordenador y el smarthphone libres de software malicioso para evitar el robo de claves personales, ficheros o informaciones comprometedoras.
Un joven de 21 años fue detenido el pasado viernes por acosar y amenazar de muerte a través de Internet a una vecina suya, de la misma edad. El joven llegó a crear ocho cuentas falsas en la red social Tuenti, que utilizaba para mandar mensajes amenazantes a la joven, a su familia y a algunos de sus amigos.
La policía comenzó a investigar en octubre a raíz de tres denuncias interpuestas en Zaragoza, por parte de la joven víctima principal del ciberacoso, su madre y un amigo.
Las amenazas anónimas habían comenzado a través del correo electrónico, pero que luego se extendieron a la red social online Tuenti, adquiriendo en ocasiones carácter sexual y e incluían amenazas de muerte.
La Policía estableció con rapidez un operativo para localizar al emisor de estas amenazas online, aunque fueron complicadas porque no se trataba de ningún exnovio ni un amigo cercano. Finalmente resultó ser un vecino, conocido del grupo de amigos de la víctima pero no cercano. La proximidad de la vivienda "acentuaba más, si cabe, la potencial peligrosidad", según la Policía.
El joven zaragozano es el segundo ciberacosador detenido en menos de un mes en Aragón. El 20 de octubre, la Guardia Civil apresó en Huesca a otro joven, de 25 años, por hostigar a una menor de edad. En esta ocasión, el detenido amenazaba con publicar fotografías de la chica en una red social en contra de su voluntad, si esta no accedía a mantener relaciones sexuales con él (actividad conocida como sextorsión). Las Fuerzas de Seguridad recomiendan proteger al máximo la privacidad en estas redes sociales y denunciar estos casos en cuanto comiencen.
La línea de denuncia online de PantallasAmigas recibió durante el pasado año 2010 un total de 210 denuncias. La edad media de los denunciantes fue de 33,6 años, recibiéndose un 5,7% de denuncias de menores y otro 3,3% de denuncias efectuadas por adultos referidas a problemas sufridos por un(a) menor.
La mayoría de denuncias procedían de España (71,9%) con una presencia minoritaria de otros países encabezada por Argentina y Colombia, seguidos a cierta distancia por Perú, México, Chile, Uruguay y Venezuela.
En cuanto al objeto de las denuncias las más frecuentes fueron sobre estafas, fraudes y otros temas de consumo relacionados con las NTIC (39%). Le siguen en frecuencia las quejas por juegos online (17,6%), los insultos, injurias, difamaciones y calumnias online (11,9%), vulneraciones de los datos personales (10,0%), amenazas e intimidación (9,0%), problemas derivados del sexting (8,6%), suplantación y robo de contraseñas (8,6%). En cuanto al ciberacoso y el ciberbullying, estuvo presente con un 7,6% en el caso de ciberacoso entre adultos y un 1% de casos de ciberbullying. Tan sólo se registró una denuncia relacionada con un posible grooming (0,5% de las denuncias).
El entorno más común donde se producen los casos objeto de denuncia fue el de los juegos online (18,1% de las denuncias). Las redes sociales online son el tercer entorno más frecuente de problemas denunciados (17,1%). Después aparecen el email y los teléfonos móviles (10,5% en cada caso), los vídeos online (7,6%), la mensajería instantánea y el chat (5,7%), las tiendas online (4,8%), los webs pornográficos (4,3%) y las webcam (4,3%). Los blogs y los proveedores de Internet protagonizan en ambos casos el 1,9% de las denuncias recibidas en el servicio. Webs de otros tipos no clasificados en las otras categorías anteriores, aparecen en el 17,6% de los casos (2º entorno más frecuente).
En lo que va del año 2011 las denuncias recibidas en Denuncia-online.org ya han superado las recibidas en todo el año 2010. Aunque los datos no serán publicados hasta que finalice el año, se está observando recientemente un aumento alarmante de los casos relacionados con la sextorsión, que en 2010 fue objeto de denuncia en 8 ocasiones (3,8% de las denuncias recibidas).
Kirsten era una solitaria adolescente estadounidense que se vio afectada por el lado más oscuro de la fama en Internet. Su aventura en Internet comenzó en 2006, con tan sólo 13 años, cuando comenzó a buscar en Internet una manera de huir del bullying racista que sufría en su colegio, donde era una recién llegada. Los padres de Kiki, buscando alejarla del colegio donde no cesaba el bullying, decidieron que continuase su educación en casa (algo legal en los EEUU) potenciando su creatividad en el terreno de la moda y el diseño, con la intención de que continuase sus estudios por esa rama en la Universidad. Esto acabó convirtiendo Internet en su principal lugar para hacer amigos. Con 14 y con permiso de sus padres, creó un alterego en MySpace bajo el nombre de Kiki Kannibal, donde publicaba fotos de sí misma luciendo toda una serie de peinados y vestimentas, con toques góticos, punks y con un componente erótico importante en sus poses, expresiones y ropa. En 3 meses sus amigos virtuales llegaban a los 25.000. Ella no los veía como gente real, sino como su puntuación en una especie de videojuego.
Se convirtió en lo que se denomina en inglés una scene queen, una reina del estilo scene kid, mezcla de elementos de la madurez e infantiles, y era una foco de atención en MySpace: llegó a tener hasta 2 millones de espectadores en sus shows trasmitidos por video-streaming. Al poco tiempo surgieron más de 500 perfiles en Facebook que la suplantaban, haciéndola con frecuencia objeto de burla, odio, amenaza y ridiculización. Su perfil de MySpace aparecía cada día lleno de insultos. Los ciberataques y el ciberbullying contra la joven cibercelebridad fueron in crescendo: otras usuarias de MySpace publicaron su nombre real y su teléfono, hasta llegar a recibir amenazas de muerte y comentarios sexuales agresivos, aunque también contaba con legiones de seguidores y admiradores. Sus padres pese a ser conscientes de estos ataques y vivirlos muy de cerca (la casa familiar aparecía con pintadas insultantes y era atacada por vándalos con huevos y pintura), no acabaron de tomar medidas para alejarla de la Red. Se quejaron a MySpace y los perfiles de los ciberabusones fueron borrados. No sirvió de mucho: los chavales creaban otros nuevos inmediatamente. Los blogs anti-Kiki, las amenazas por email o por teléfono continuaron. La policía decía que no podía hacer nada, porque los chicos que la amenazaban eran anónimos. Kiki no quería dejar de usar Internet, porque de lo contrario, "los ciberabusones habrían ganado".
Las amenazas y los peligros llegaron aún más dentro de sus vidas offline. Un novio de 18 años que la había conocido por Internet (y que era otra modesta celebridad en la red social MySpace) y que contaba incluso con el beneplácito de sus padres resultó tener un oscuro pasado de groomer de menores: ligaba con niñas online, algunas tan jóvenes como de 12 años, para luego presionarlas para tener sexo cuando las conocía fuera de Internet. Los padres descubrieron que había forzado a Kiki a tener relaciones sexuales y llevaron el caso a la policía. El joven murió tras caer de un segundo piso cuando estaba siendo detenido al ser descubierto rodeado de niñas menores y en posesión de drogas. Algunas personas, conocedoras del hecho, acusaron online a Kiki de la muerte del joven.
La caída a los infiernos de Kiki continuó cuando comenzó a ser explotada en sesiones colectivas de ataque contra ella en el web de cotilleo y exhibicionismo Stickydrama. El propietario del web reconoció en su cuenta en Twitter que "si no puedo tenerla, la voy a destruir".
La familia al completo, incapaz de retomar el control de la situación, tuvo que cambiar de domicilio para escapar de las amenazas: el padre tuvo que aceptar un empleo con menor sueldo y perdieron su casa en Florida. Tras cuatro años de pesadilla on y offline, Kiki (que ha cumplido 18 años) y su hermana (3 años menor) diseñan ahora joyas que venden en su propia tienda online.
"Nunca me imaginé que me iba a topar con esta clase de gente, pero en Internet estás expuesta a que gente que es capaz de hacer cualquier cosa", declaró Kiki en una reciente entrevista a la revista Rolling Stone.
Este lunes 13 y martes 14 tendrán lugar en Málaga unas jornadas formativas organizadas por el ayuntamiento de esta ciudad e impartidas por PantallasAmigas, en torno al tema de la «Violencia entre iguales (menores y jóvenes) a través de las Nuevas Tecnologías».
Las jornadas se componen de:
10 horas en total de formación práctica presencial (que tendrá lugar en el Centro Municipal de Formación, C/ Palestina nº 7), dirigida a personal del ayuntamiento que trabaje en las áreas implicadas;
una mesa redonda divulgativa (2 h) en el Centro Municipal de Atención a la Familia, C/ Donoso Cortés, nº 4, donde participarán diversos colectivos profesionales de la ciudad;
y un ejercicio práctico de evaluación mediante teleformación (3 h)
Programa de las jornadas
Lunes 13 de junio
12:30-14:20: Las redes sociales como reto para la privacidad y la ciberconvivencia. Por Jorge Flores, de PantallasAmigas.
17:30-18:30: Aspectos legales. Por Ofelia Tejerina.
18:30-19:30: Videojuegos, juegos sociales y juegos de azar. Por Jorge Flores.
19:30-20:30: Caracterización del ciberbullying. Por Jorge Flores.
Martes 14 de junio
12:30-14:30: Mesa redonda "Las y los menores como autores y víctimas de ciberdelitos".
Dña. Rosa María Torres Rosados. Del Gabinete de asesoramiento sobre la convivencia escolar de la delegación provincial de educación de Málaga. Maestra.
D. Sergio Matadero Ortas. Inspector del grupo de delitos tecnológicos Personas de Maĺaga.
Dña. Isabel Fernández Olmo. Fiscal jefe de la fiscalía de menores de Málaga.
Dña. María Teresa Salces Rodrigo. Asesora responsable del área de menores del Defensor del pueblo andaluz.
Modera: José Antonio Torres, responsable del CEMAIF.
Coordina: Jorge Flores Fernández, de PantallasAmigas.
16:30-17:30: Protocolo EMICI de intervención ante el ciberbullying. Por Rosario del Rey.
Cada vez son más comunes los casos de docentes cuya imagen circula por Internet, acompañada de comentarios en las redes sociales online. A veces la víctima desconoce que la burla, la injuria y la calumnia se prolongan durante meses. «Estamos indefensos», se queja un psicólogo del sindicato ANPE.
Según datos de este sindicato de profesores este tipo de denuncias recibidas por el Defensor del Docente por ciberacoso se han multiplicado por tres. Todo suele empezar con una fotografía tomada a escondidas durante la clase que acaba publicada en una red social de Internet, a veces con montaje fotográfico añadido. Este hecho puede ser constitutivo de un delito contra el derecho al honor por el cual el docente podría acudir a los tribunales, y además clara causa de expulsión si acudiese a las normas de régimen interno del centro.
Suele suceder que cuando la víctima quiere tomar cartas en el asunto, el supuesto culpable ha eliminado dichas imágenes y con ello las pruebas desaparecen. Si el profesor o profesora afectado se ocupa de guardar pruebas del acoso (como recomienda el decálogo para víctimas de ciberbullying de PantallasAmigas), la cosa cambia bastante y la denuncia puede prosperar con mucha más facilidad.
Tan dramáticas como lo fueron para Tiri, el niño estonio de 11 años que se suicidó después de que su acosador (un joven español) distribuyera entre todos sus amigos las fotografías en que aparecía semidesnudo. O el caso de Jesse Logan, la estadounidense de 18 años que se ahorcó después de haber visto difundida una foto comprometida que le había enviado al que entonces era su novio.
Los más expuestos son los jóvenes entre 13 y 17 años, según Jorge Flores Fernández, director de PantallasAmigas, una iniciativa de promoción de la seguridad de los jóvenes en las nuevas tecnologías. "Lo hacen para ligar, coquetear, o simplemente relacionarse y divertirse. Otras veces lo hacen por la presión del grupo, el sentimiento de pertenencia o el deseo de transgredir. Pero, en general, no ven las consecuencias. No creen que las imágenes vayan a salir. Pero salen, algunas veces, incluso, como una broma", afirma Flores.
El psicólogo Javier Urra, primer Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, corrobora la motivación de los adolescentes. "Es una manera de sentirse aceptados en el mundo virtual, consideran que es su forma de hablar y que los adultos se asustan porque no las entienden. Es su espacio de autonomía, su mundo íntimo". El 85% de los menores entre 10 y 15 años conectados a Internet, según un reciente estudio del Observatorio de la Seguridad de la Información, responde que no sabría qué hacer ante un caso de acoso en la Red, indica Urra.
La última práctica de riesgo a la que se ha dado nombre es el sexting, o envío de este tipo de fotografías a través del teléfono móvil. Jorge Flores cree que, en este caso, "el problema es mayor porque hay menos percepción de riesgo y los adolescentes tienen muy poca cultura de la privacidad". El psicólogo cree que, para los nativos digitales, manejar conceptos como la privacidad de lo personal es muy complicado: "Creo que habrá un efecto rebote y se estabilizará, pero se necesita tiempo".
El envío o tenencia de fotografías comprometidas de menores "pueden constituir un delito de pornografía infantil, aunque sea entre los propios menores", asegura el director de Pantallas Amigas.
La Policía Nacional ha detenido a tres hermanos por hostigar a varias menores mediante grooming. Amenazaban a las niñas para que conectaran la webcam y les exigían realizar determinadas acciones sexuales. Gracias a un descuido de uno de los acosadores, una menor pudo sacar una fotografía de su rostro con su teléfono móvil que posteriormente facilitó a los investigadores su identificación.
La operación se inició como consecuencia de la denuncia interpuesta por la madre de una de las víctimas, de 14 años estaba, que estaba siendo víctima de amenazas y abuso sexual online por parte de uno o varios individuos que, tras ganarse su confianza en Internet, la convencieron para que enviase imágenes de ella desnuda para realizar cibersexo. Siguiendo la pauta típica de los groomers, una vez obtenidas las fotografías comprometidas de la menor, las utilizaron para amenazarla y así obtener más y que se mostrase a través de la cámara web.
El primer contacto entre la víctima y uno de los detenidos se produjo en casa de una amiga de la denunciante. Reunidas cuatro menores, contactaron a través de Internet con un individuo que afirmaba ser también menor de edad. Éste las convenció para que se desnudaran ante la cámara.
Los arrestados habían enviado también a las menores enlaces a webs con contenido pornográfico de adultos y niños. Los ciberchantajistas mostraban un perfil de menores de edad en la Web para captar a nuevas víctimas.
Se localizaron en el domicilio de los detenidos varios archivos de pornografía infantil en uno de los ordenadores y en CDs y DVDs grabados, contactos de menores de edad en la libreta de direcciones del correo electrónico y en programas de chat, así como el número de teléfono móvil de una de las víctimas. Además en el momento de realizar el registro, que se encontraban en pleno proceso de descarga archivos de pornografía infantil.
Los consejos que da la Policía a padres y madres para evitar estos casos incluyen:
establecer reglas de uso y controlar los tiempos de utilización de los ordenadores
situarlo en una zona común del domicilio, al objeto de supervisar las páginas a las que se accede
hablar con los menores de los riesgos que entrañan los chat, en los que pueden contactar con supuestos amigos que no lo son o con personas que se hacen pasar por otros menores para ganarse su confianza
insistir a los menores para que no faciliten datos personales ni ningún tipo de fotografías o vídeos a nadie a través de la Red, si no existe una completa seguridad sobre quién los va a recibir
en caso de que algún menor detecte al navegar contenidos que puedan ser peligrosos o situaciones que les puedan parecer extrañas, que avise inmediatamente a sus padres
El 23,7% de los alumnos de ESO de Baleares es víctima de ciberacoso a través del MSN-Messenger.
El catedrático de la Universitat de les Illes Balears (UIB) de Psicología Educativa, Eduardo Rigo, durante la presentación de la publicación 'El cyberacoso entre los jóvenes. Características e impacto del cyberbullying entre el alumnado de ESO de Baleares', ha señalado que este fenómeno "se mueve mejor" a través de las redes sociales por lo que alertó de una previsible aumento a partir de los próximos años.
Rigo ha remarcado que la mejor herramienta ante esto es la prevención y ha indicado que uno de los principales problemas que provoca el cyberacoso es la separación entre padres e hijos: les dedican menos tiempo, de manera que los niños acaban siendo educados por sus iguales, esto es, por personas inmaduras.
Del estudio también destacan otros datos:
el 29,3% de alumnos afirma conocer casos de burlas a través de redes sociales
el 23,6% ha suplantado la identidad a través de chats
un 25,4% de las víctimas del ciberbullying lo mantiene en secreto
el 55,8% conoce a los autores de su ciberabuso
La rectora de la UIB, Montserrat Casas, ha lamentado que los niños "desde muy jóvenes vivan más enganchados a la pantalla que a los libros". En este sentido, el libro detalla que un 89,7% de los alumnos de ESO tienen acceso a la red desde su casa, la mayoría de ellos -47,4%- en su habitación, lugar donde es menos aconsejable puesto que los padres no pueden vigilar cómo navegan.
Un 14% de los alumnos de Secundaria ha sido víctima de insultos, burlas, amenazas, suplantación de identidad, difusión de imágenes comprometidas o rumores, al menos una o dos veces a la semana mediante internet (webs -incluyendo redes sociales-, chat, mensajería instantánea, correos electrónicos) o por medio del teléfono móvil. Así se refleja en una encuesta realizada por los equipos de Educació i Ciutadania y el de Psicologia del Desenvolupament i l´Educació de la Universitat de las Baleares. Jaume Sureda, uno de los investigadores que ha realizado este informe junto a Rubén Comas y Mercè Morey, precisa que ese porcentaje no representa a víctimas de ciberacoso en todo el sentido de la palabra, ya que que éste implica una intimidación con reiteración en el tiempo.
De todas formas, los autores precisan que el acoso escolar ´tradicional´ sigue siendo más habitual que el ciberbullying aunque puntualizan que ante este, la indefensión es más grande.
Sureda, catedrático de Pedagogía Aplicada y Psicología de la Educación, explica que el peligro de los menores antes las nuevas tecnologías no está tanto en los contenidos (pornográficos, violentos, discriminatorios...), sino en sus relaciones en estos nuevos medios.
Así, en el informe figura que el sistema de mensajería instantánea MSN, el chat y las redes sociales online como Facebook o Tuenti (redes que utilizan siete de cada diez adolescentes de las islas baleares) son los escenarios más frecuentes del ciberbullying porque es más fácil en ellas mantener el anonimato y encontrar aliados que aplaudan sus insultos, burlas o amenazas.
Un 12,9% respondió que había insultado a través del MSN, pero de forma ocasional.
Un 1,1% dijo que suplantaba la identidad de compañeros en el Messenger, por lo menos una vez a la semana.
Son, en su mayoría, chicos.
En la mayoría de los casos, los jóvenes que sacan peores notas llevan a cabo más actos de intimidación ocasional que los que obtienen mejores calificaciones.
El 13,6% de los intimidados dijo que era compañero del agresor y que se llevaban bien.
Un 21% indicó que habían sido amigos.
Un 25% señaló que no tenían ninguna relación.
Entre un 20 y un 25% de los casos, la víctima no fue acosada por sólo una persona, sino por un grupo.
Con la firma de un protocolo para resguardar la seguridad de los menores de edad en internet finalizó en Lisboa (Portugal), la XI Conferencia Iberoamericana de Ministras, Ministros y Altos Responsables de Infancia y Adolescencia.
El encuentro, denominado "Prevenir las desigualdades y garantizar los derechos de la infancia: la importancia de las tecnologías de la información y la educación", contó con la presencia de la ministra chilena de Planificación, Paula Quintana y Eugenio San Martín, director del Servicio Nacional de Menores (Sename) chileno.
Así como Internet o los computadores son un derecho para los niños, también implica un deber de protección ante los peligros que implican, como el llamado “grooming” o ciber-acoso. Y es principalmente en eso donde se ha centrado la discusión hasta ahora. “El tema central de la conferencia que dice relación de cómo los países generan prácticas efectivas de protección de los derechos de niños y niñas a propósito del uso de las Tecnologías de la Información”, explicó el director nacional del Sename, Eugenio San Martín
Agregó que los representantes chilenos exhibieron la experiencia “en el programa (...) “Chile Crece Contigo” (...). San Martín explica que también se presentó como experiencia y práctica el esfuerzo del gobierno de penalizar el grooming como un delito que provoca daño a niños a través del uso inadecuado de las tecnologías. “Comentamos los esfuerzos que se han hecho para legislar sobre esta materia tanto para legislar sobre esta materia como las campañas de difusión que se han emprendido tanto por parte del ministerio del interior, del sename, el ministerio de justicia, etc.
Para dar con la persona que acosaba a su hijo de 15 años, suplantó su identidad en un chat y dió con él. Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido a un joven de 22 años acusado de un presunto delito de corrupción de menores.
La madre tenía indicios de que su hijo estaba siendo acosado por alguien y que llevaba en torno a tres meses comunicándose con esa persona a través del messenger.
Fuentes de la investigación aseguran que la madre entró en el messenger y logró leer las conversaciones que éste mantenía con el arrestado y también charlar con él durante varios minutos.
Tras un rato comunicándose con el joven, que supuestamente le habría ofrecido dinero por favores sexuales pensando en todo momento que charlaba con el menor de 15 años, la madre logró concertar una cita con él en una céntrica calle de la ciudad de Vigo. Fuentes de la investigación aseguran además que el detenido habría ofertado dinero con anterioridad a su hijo, aunque éste se habría negado en todas las ocasiones.
Una vez que la madre logró citarse con este varón, llamó a la Policía Nacional, a la que relató sus sospechas y el presunto acoso al que estaba sometiendo el joven de 22 años a su hijo de 15. Además, les trasladó que acaba de concertar una cita con el varón en una calle de Vigo, donde se personaron los agentes para arrestarlo.
Según afirma el diario mexicano El Siglo de Torreón, un 40% de los delitos que se comete en Estados Unidos está relacionado con Internet ya sea en su planificación o en su ejecución. Las estadísticas dicen además que uno de cada siete niños es acosado sexualmente por esta vía.
Aumentan los casos de menores que tienen citas con absolutos desconocidos a los que no consideran como tales por el mero hecho de haber intercambiado con ellos conversaciones en chats o redes sociales. El verdadero perfil de muchos de ellos no era el que parecía.
Ante este fenómeno y el del creciente aumento de los ciberdelitos, en las escuelas norteamericanas han proliferado las charlas de especialistas cibernéticos para alertar a los padres de familia y a los niños sobre los riesgos de Internet.
Las recomendaciones más comunes son las siguientes:
Colocar la computadora en una parte pública de la casa y vigilar constantemente que sitios y tipo de información observan sus hijos.
Conocer las claves y contraseñas de los correos y portales que utilizan los menores es esencial, incluso para el caso de una emergencia o delito.
Revisar de manera frecuente los correos de sus hijos así como el nombre de las personas con las que tienen contacto. Si hay alguno que él o ustedes no conozcan de inmediato investigarlo a fondo y no proporcionar ninguna información personal.
Es responsabilidad de los padres el uso que el menor haga del Internet, la libertad a la privacidad no cabe aquí, sería tanto como dejar un arma cargada a su hijo.
No subir fotos personales y familiares a los sitios públicos y de ser posible no suscribirse a páginas como Myspace y Facebook. Están muy de moda, pero son el lugar perfecto para que sus hijos sean contactados por algún criminal.
Cualquier mensaje extraño debe comunicar de inmediato a las autoridades o al proveedor de Internet para ser investigado, en este caso más vale prevenir que lamentar.
Finalmente no permita que sus hijos se excedan en el uso del Internet, es muy fácil volverse adicto a tanta porquería que desgraciadamente abunda en la red de red
La Brigada de Investigación Tecnológica (BIT) del Cuerpo Nacional de Policía detecta un aumento de delitos informáticos de fraude así como un aumento de denuncias de casos de ciberacoso y grooming.
El comisario jefe de la brigada, Manuel Vázquez, explica que los ciberdelitos más frecuentes tienen un móvil económico, los delitos de fraude, en los que afirmó haber constatado un incremento. Además, asegura que, dentro de este tipo de infracciones, se pueden distinguir tres tipos: los fraudes relacionados con el uso de tarjetas de crédito para adquirir diversos bienes, los que tienen que ver con operaciones de compra-venta a través de internet y los casos de 'phising' donde los delincuentes se hacen con claves de cuentas de banca electrónica.
Además, el comisario jefe de la BIT aseguró que también se está constatando un aumento de denuncias de casos de 'ciberacoso', como puede ser el 'ciberbullying' o incluso el 'grooming'.
En el caso de esta última modalidad, Manuel Vázquez advirtió de que se trata de un "acoso a menores "con intencionalidad sexual" en el que los delincuentes acceden a través del messenger para captar, por ejemplo, imágenes de tipo pornográfico.
Pornografía
En cuanto a la pornografía infantil, que es otro de los delitos frecuentes en el ámbito informático, Vázquez explica que si bien las prácticas de pedofilia "han existido siempre", ahora "se aprovecha el anonimato que brinda el ordenador" para acceder e incluso compartir este tipo de contenidos.
Además de los fraudes y los delitos contra la pornografía infantil, entre las infracciones más frecuentes se encuentran las que van contra la propiedad intelectual y las que suponen ataques a sistemas informáticos.
Profesores de dos institutos riojanos han denunciado ciberacoso de sus alumnos que han colgado en la red social Tuenti burlas, montajes fotográficos e injurias hacia ellos.
Estas denuncias han sido puestas en conocimiento de la autoridad educativa, los responsables de los centros eduativos, la Policía y la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de La Rioja, que ya están actuando "respecto a la responsabilidad disciplinaria o penal por las infracciones administrativas y faltas o delitos penales en que hayan podido incurrir sus autores", según el sindicato.
El sindicato de profesores, ANPE, apela a los padres de los alumnos para que vigilen los foros, redes, chats y otros canales de comunicación en Internet para adolescentes en los que están circulando e intercambiando opiniones de menosprecio de la imagen y dignidad personal de amigos, compañeros de clase, padres y madres y profesores.
De lo contrario -agrega ANPE- los padres se pueden ver desagradablemente sorprendidos porque como ejercientes de la patria potestad de sus hijos menores de edad se vean en la obligación desagradable de comparecer en procedimientos disciplinarios o penales.
Por último, este sindicato de profesores pide a los responsables policiales y judiciales que actúen sobre los responsables de estos foros gratuitos para controlar el acceso a los mismos y su retirada inmediata cuando en ellos se desarrollen comentarios que atenten contra la dignidad de la persona.